Me da la impresión de que los diseñadores gráficos solemos prestar más atención a la composición de la página que a la del texto, como si eso fuese un trabajo menor; tradicionalmente, los diseñadores gráficos han diseñado tipografías, pero raras veces se ocupaban ellos mismos del texto, que solían mandar marcados con las indicaciones necesarias para que el cajista lo compusiera. Sin embargo, la autoedición ha trasladado la microtipografía al campo de responsabilidad del diseñador.
Encontré este interesante ejercicio de interletraje elaborado por el Departamento de Comunicación Visual de la Universidad de Delaware.