En la casa del futuro…
El panel de cristal deja ver las estrellas y la lluvia. La casa móvil gira con el sol. Sus paredes correderas posibilitan que la vegetación invada la vida. Colocada sobre unas guías puede avanzar por la mañana hasta el mar y regresar al atardecer al bosque.
Formulario para un nuevo urbanismo Gilles Ivain, 1958
Releo un librito, Urbanismo situacionista. Allí se dice que si el mundo moderno es aburrido, la arquitectura debería invitarnos a soñar (y no con hipotecas precisamente). Cada cual habitará su catedral personal; habrá habitaciones que harán soñar más que una droga y casas donde sólo se podrá amar o que atraerán irremisiblemente a los viajeros. Además, los barrios de la ciudad se corresponderán con los estados de ánimo cotidianos: el barrio feliz, el barrio trágico, el barrio útil, el barrio siniestro:
Al Barrio Siniestro no le haría ninguna falta ocultar los peligros reales, como las trampas, las mazmorras o las minas. Acceder a él sería complicado. Estaría decorado de forma espantosa (silbidos estridentes, campanas de alarma, sirenas periódicas con cadencias irregulares, esculturas monstruosas, móviles mecánicos con motor llamados auto-móviles), y poco iluminado por la noche, pero violentamente iluminado durante el día mediante el empleo abusivo del fenómeno de la reverberación. […] Al explorar el Barrio Siniestro, el niño y el adulto aprenderían a dejar de temer las manifestaciones angustiantes de la vida y a divertirse con ellas.
Formulario para un nuevo urbanismo Gilles Ivain, 1958
La ilustración de arriba es de Julien Pacaud y se titula World Construction Set: una señorita geómetra reconstruye el mundo a partir de cubos.
Actualización: Un arquitecto ítalo-israelí proyecta construir un rascacielos giratorio en Dubai.