El septimo sello, una película entretenida.

Me rí­o con la crónica de Portorosa sobre una proyección de cine de Ingmar Bergman:

Cuando acabó la pelí­cula, al levantarnos, oí­ a mis vecinas:

— Pues estuvo entretenida…

Y ahí­ se resume Ingmar Bergman, sus dudas, su obsesión por la religión, la muerte y el paso del tiempo.